Por: Félix Ayurnamat Dentro del mundo del arte contemporáneo, la figura del artista como vocero de la colectividad debe emerger como una voz disidente frente al elitismo predominante, en contraste con ciertos artistas, como Gabriel Orozco. En este contexto, es urgente la necesidad de acercar el arte a las personas y romper las barreras que lo separan de la comunidad. Desde mi trinchera busco crear una mirada crítica y propositiva que impulse a mi obra a conectar profundamente con su entorno, nutriéndose de las experiencias cotidianas y creando piezas que abran espacios de reflexión y transformación social. Los artistas deberíamos desprendernos de la comodidad del pedestal elitista y sumergirse en las vivencias y problemáticas de nuestra comunidad. Es esencial entender que el arte no puede ser un ejercicio aislado e inaccesible, sino una herramienta que se nutre de la diversidad cultural y se enriquece con la multiplicidad de perspectivas. Así, los artistas debemos establecer ...