Querido Félix Llegó la primavera. Otra vez. No sé cómo es que este maldito ciclo de la vida sigue empeñado en repetirse cada año sin mi consentimiento. Como si yo no hubiera dejado en claro, desde la infancia, que el calor me ofende a nivel personal. Pero aquí estamos otra vez: sudando, derritiéndonos y viendo cómo todo a nuestro alrededor se llena de alergias, insectos y gente que cree que el sol es su amigo. Hablemos de eso. ¿Cómo es posible que aún existan personas que disfrutan esta temporada? Que son "Teem calor" y "la energía primaveral". Me preocupan, Félix. Los veo y me pregunto si son humanos o si alguna vez se han visto obligados a sobrevivir en un transporte público sin aire acondicionado, rodeados de 180 desconocidos con las axilas al descubierto. Porque si hubieran vivido eso, no estarían tan felices. Y luego está el sudor. Mi gran enemigo. No hay peor humillación que salir de casa oliendo a vainilla y regresar oliendo a chivo. La primavera es esa época...