Por Centro de Estudios Forteanos
Los nahuales son una figura profundamente arraigada en el folclore mexicano, vinculados a antiguas creencias mesoamericanas y mantenidos vivos a través de los relatos y tradiciones populares. En términos generales, un nahual es un ser humano, generalmente un brujo o chamán, que posee la capacidad de transformarse en un animal. Esta habilidad no solo les permite cambiar de forma, sino también acceder a poderes místicos y ejercer influencia sobre el mundo natural y las personas que los rodean.
Orígenes y Significado
La palabra nahual proviene del náhuatl "naualli", que significa "oculto" o "encantador", y está íntimamente ligada a la magia y a las habilidades sobrenaturales. Según las antiguas tradiciones mesoamericanas, cada persona tenía un tonal, una especie de espíritu animal o guía espiritual, con el que compartía un vínculo profundo. Se creía que este espíritu podía tomar la forma de un animal, generalmente determinado por la fecha de nacimiento de la persona en el calendario mesoamericano, lo que establecía una conexión entre el individuo y su tonal desde el momento de su nacimiento.
Con el tiempo, los naualli, o practicantes de este tipo de magia, adquirieron una reputación ambivalente. Mientras algunos eran venerados por su capacidad de interceder a favor de la comunidad, otros eran temidos por sus supuestas prácticas oscuras y su habilidad para causar daño. Durante la época colonial, las autoridades españolas, incluyendo la Inquisición, consideraron estas creencias como supersticiones, pero las prácticas de los nahuales nunca fueron completamente erradicadas, persistiendo en las áreas rurales y en la cultura popular.
Las Transformaciones y los Animales
El aspecto más destacado del nahualismo es la capacidad de transformación en animales. Las leyendas describen a los nahuales convirtiéndose en animales feroces, como jaguares, coyotes o serpientes, aunque también se mencionan otras criaturas más comunes como perros o aves nocturnas. En algunos relatos, los nahuales no solo adoptan la apariencia de estos animales, sino que adquieren sus habilidades: la velocidad del jaguar, la astucia del coyote o el vuelo de un Tecolote. Este poder se percibía como una forma de ejercer control sobre las fuerzas de la naturaleza y los humanos, empleándose tanto para el bien como para el mal.
En algunos relatos, se dice que el nahual transforma su cuerpo completamente, mientras que otros sugieren que emplea hechizos o ilusiones para que los demás lo perciban como un animal. En los documentos coloniales, como los escritos de Orozco y Berra, se describen nahuales que aterrorizaban a las comunidades locales adoptando formas de perros negros y horribles, o brujas que se convertían en bolas de fuego, sugiriendo que estas transformaciones también estaban asociadas con el miedo y la superstición que generaban en las comunidades rurales.
El Nahualismo en la Época Colonial
Durante el periodo colonial, los nahuales fueron objeto de persecuciones y censuras por parte de la Iglesia y la Inquisición española. Sin embargo, a diferencia de otras formas de superstición y herejía, el nahualismo sobrevivió, en parte debido a que las autoridades coloniales veían a los indígenas como personas ignorantes e "inocentes" de las graves ofensas contra la fe cristiana. Esto permitió que las creencias en los nahuales continuaran, aunque en un segundo plano y lejos del escrutinio de las autoridades.
En algunos registros coloniales se encuentran testimonios de nahuales acusados de realizar pactos con el diablo, una interpretación cristiana de sus prácticas mágicas. Los documentos de la época también mencionan que estos brujos realizaban hechizos para proteger las cosechas, transformaban objetos en animales o conjuraban tormentas, lo que refuerza la creencia en sus poderes sobrenaturales. No obstante, la visión cristiana los condenaba como agentes del mal, alejando la comprensión original mesoamericana de estas prácticas que, en muchos casos, estaban más orientadas al equilibrio y la armonía con la naturaleza.
El Nahualismo en la Actualidad
Hoy en día, el nahualismo sigue siendo parte de las tradiciones, especialmente en las zonas rurales. En comunidades indígenas y mestizas, aún persisten las historias de brujos que pueden transformarse en animales, ya sea para proteger sus hogares o para causar daño a sus enemigos. Aunque los contextos y significados han cambiado con el tiempo, la figura del nahual sigue siendo vista con una mezcla de respeto y temor.
En tiempos recientes, algunos estudiosos han relacionado el concepto de los nahuales con la criptozoología, sugiriendo que las leyendas de criaturas míticas como hombres-lobo o grandes bestias en áreas rurales mexicanas podrían estar conectadas con antiguos relatos de nahuales. Sin embargo, este es un tema de debate, ya que las raíces del nahualismo están profundamente entrelazadas con el simbolismo espiritual y religioso de las culturas mesoamericanas, lo que lo diferencia de las criaturas simplemente mitológicas o críptidas.
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